La clienta llegó a nosotras con un piso recién comprado, en estado desastroso pero con mucho potencial.
Carpintería clásica con molduras, techos altos, una pequeña terraza con vistas a un patio interior muy tranquilo y con mucha luz natural. Quería reformar el piso para alquilarlo, por lo que el objetivo era sacar el máximo partido al piso con la mínima inversión.
Hicimos una nueva distribución del piso, dándole así un aire nuevo y haciéndolo más funcional y actual. Cambiamos los acabados, pero mantuvimos la esencia del piso con toda la carpintería restaurada.
Finalmente quedó un piso estilo nórdico con un toque industrial. Cocina americana con isla, que caía en cascada para conseguir una mesa de comedor voladiza, dos habitaciones (una de ella en suite) y dos baños.
Un piso realmente bien aprovechado.