7 fachadas coloniales ¡sensacionales!

Joelia Dávila Joelia Dávila
Hacienda Chaká, Arturo Campos Arquitectos Arturo Campos Arquitectos Puertas y ventanas de estilo colonial
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El estilo arquitectónico conocido como colonial se remonta a los tiempos de la colonización española en las diversas regiones de América, en donde las nuevas construcciones debían ser sólidas y fuertes pero mantener por supuesto el estilo barroco, dominante en esos tiempos en Europa. Características del barroco son los grandes arcos, las cornisas, los detalles ornamentales, las molduras, la herrería de rigurosas y complicadas formas, los altos techos y estructuras. Por otro lado, la fuerza en las construcciones se realizaba con materiales endémicos de cada región, utilizando adobe, ladrillo, piedra, barro para las tejas y baldosas, arcilla, paja, lodo y madera. Cada región iba adaptando sus construcciones según lo exigieran las condiciones climáticas del lugar, siendo las más populares las formas cuadrangulares que rodean amplios patios, corredores cubiertos para proteger del sol y la lluvia, ubicando los servicios en un ala extendida y las habitaciones en la planta alta.

A pesar de ser un estilo arquitectónico que forzosamente se instauró en nuestro país y en muchos otros de América, su belleza, encanto y funcionalidad se han honrado desde siempre, replicando formas, detalles y elementos en construcciones actuales en donde la modernidad se cuela por las rendijas logrando hermosas residencias con una apariencia cálida y acogedora, pero con las comodidades de la vida actual.

En este libro de ideas te llevamos a conocer 7 casas coloniales, algunas más modernas que otras, ¡pero todas encantadoras!

1. Color y perfección

Para iniciar nuestro recorrido nos vamos a Yucatán, en donde visitaremos una muy colorida hacienda en donde el agua y su dulce música nos acompaña mientras recorremos y reconocemos la perfección de sus formas, detalles y acabados, trabajo que estuvo en manos de Arturo Campos Arquitectos.

La casa cuenta con dos grandes crujías que se conectan hacia un espacioso patio posterior con jardín y una enorme alberca. Por fuera y de frente, el rostro de la vivienda es muy discreto pero no menos agradable. La madera hace su aparición en la marquetería y celosías de las ventanas, así como en el gran portón principal, cuyas molduras en cantera blanca destacan sobre el color terracota de las paredes. Delicadas bocas de agua crean cascadas a lo largo de la fachada sobre dos piletas de agua, alegrando el sendero hasta llegar a la puerta, y se iluminan con una serie de farolitos tan románticos como encantadores.

Si quieres seguir disfrutando de la genialidad de los arquitectos mexicanos, visita 10 casas de dos pisos ¡por arquitectos mexicanos!

2. Colonial y moderna

Fachada, Casa Cuayantla Itech Kali Casas de estilo colonial Azulejos

Respetando la tipología colonial de la arquitectura de Puebla, el despacho Itech Kali se decantó por crear una residencia muy moderna que honra ciertos elementos tradicionales de una manera muy particular.

La casa se construye rodeando un pequeño patio que en estos tiempos no es un atrio sino el garaje de los autos, cubierto por una terraza revestida en azulejo y rodeado por dos grandes volúmenes. El portón principal es de madera sólida, fuerte y rojiza, resaltando entre la blancura de la lisa superficie. El pretil coronado en ladrillo rojo, el ojo de buey al centro del edificio y la talavera se hacen presentes en un diseño de formas geométricas puras, vidrios claros, marquetería de aluminio y losetas cerámicas absolutamente modernas. ¡Vaya combinación, bella y funcional!

3. Algo terroso

Fachada Principal. homify Oficinas de estilo colonial

Ahora volamos unos cuantos kilómetros hasta llegar a Los Cabos, en Baja California Sur, para conocer una casa cuyo diseño se exhibe en deliciosos colores terrosos, entre crema, café y arena, logrando una perfecta fusión con el paisaje semidesértico de la región.

En el estilo podemos notar un aire de arquitectura californiana, cierto es que esta corriente retoma elementos de la arquitectura colonial, adecuándolos a las condiciones climáticas de las regiones donde se desarrolla: techos altos y a cuatro aguas para una mejor ventilación, colores cálidos y arenosos para integrarse al paisaje, muchas cubiertas para proteger del fuerte sol y vegetación tropical y desértica. Los faroles, la herrería y los grandes portones de madera se hacen presentes y embellecen con sus formas y colores.

Diseño a cargo de Cofer Studio.

4. Jardín protagonista

Del despacho Excelencia en Diseño nos encontramos con esta elegante y a la vez rústica residencia localizada en Jalisco. En ella destacan elementos tradicionales como las tejas, los arcos, las baldosas de barro y las estructuras de madera en los techos, pero también ciertos detalles contemporáneos se hacen presentes, iluminando cada rincón, como el acceso principal que consta de dos puertas de cristal rodeadas por delgadas ventanas, sin herrería ni portones de gruesa madera. Algunos vitrales decorativos coronan una de las torres que conforman el conjunto, y al centro, un jardín con estanque es cruzado por un delicado puente en donde por fin aparece un barandal de hierro negro forjado en delgadas orlas.

La sombra que crean los inmensos árboles del jardín logran una atmósfera lozana y fresca ¡inigualable!

5. Casa de campo

En el estado de México nos encontramos con esta casa de campo que, rodeada de frondosa vegetación, destaca blanca y serena entre el verdor de las enredaderas que la engalanan.

El diseño, a cargo de De Ovando Arquitectos, consta de una serie de volúmenes que se integran en una especie de hacienda enclavada en medio de un generoso terreno. Esta es sólo una de las fachadas, pero concentra en ella la belleza del conjunto: un corredor lateral rodea la planta baja, las cubiertas son de teja de barro, la madera se hace presente en la marquetería, columnas y molduras, y la modernidad hace de las suyas en las ventanas de la planta alta, en donde se omite la herrería pero destaca la inmaculada belleza del cristal. El color blanco que se ha designado en las paredes deslumbra en medio de árboles y enredaderas, mostrando un paisaje refrescante y paradisíaco.

6. Privacidad rústica

De regreso en Puebla, nos adentramos hasta llegar al hermoso pueblo de Atlixco. Aquí conoceremos esta hermética casa cuyo rostro apenas muestra una probadita de los interiores, pero lo suficiente para reconocer su fuerte personalidad. Los materiales utilizados son tabique amarillo, ladrillo de barro, cantera y madera. Las formas dominantes son geométricas, en donde altos pretiles ciegos e inclinados techos de teja rodean la construcción. Un enorme portón de madera con remaches de herrería protege la entrada vehicular, y una reja negra se abraza de la barda de ladrillo para proteger el acceso peatonal.

¿Quién dice que la sencillez no se lleva con la belleza? Los expertos de Ipalma Arquitectos nos muestran lo contrario.

7. Colores frescos

Terminamos en el municipio de Hunucmá, en Yucatán, en una fresca casa en donde los cálidos colores contrastan con el paisaje circundante pero a la vez se doblegan ante él gracias a la dulzura de sus tonalidades y la sencillez de sus formas.

Esta es una muestra perfecta de que lo sustancial de cualquier estilo puede prevalecer e identificarse aún junto a elementos modernos: un amplio corredor rodea la casa y se protege con una serie de arcos cuyas molduras blancas resaltan sobre el color salmón de la superficie. Sobre el brillante amarillo del fondo lucen modernos ventanales de vidrio ahumado protegidos por rejas de herrería de diseño muy simple, y varias mecedoras de cuero y madera invitan a disfrutar del paisaje y olvidarse de que vivimos en un siglo lleno de complicaciones…

Diseño a cargo de Porto Arquitectura + Diseño de Interiores, y fotografía por Armin Pérez.

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